El fuerte aumento de la siniestralidad en el seguro de Autos, que a finales del tercer trimestre escaló hasta el 79% de las primas, casi cinco puntos más que un año antes, afecta a todas las entidades que operan en este ramo, pero muy especialmente a las entidades de directo, que están viendo muy castigados sus resultados por el impacto de la inflación en los costes siniestrales.
La entidad más importante de directo, Línea Directa, está tan afectada por la crisis de su principal ramo que baraja no repartir dividendos entre sus accionistas, «ya que no se dan las circunstancias». La entidad acumula este año unas pérdidas de 14,6 millones de euros hasta septiembre y el valor de la acción ha caído un 35% desde que salió a bolsa en 2021, cuando se comprometió a destinar a dividendos el 90% de sus beneficios, siempre que la solvencia no bajara del 180%, límite al que ha llegado justo al final del tercer trimestre.
Otra entidad de directo muy impactada por esta situación es Admiral, que opera con las entidades de directo Qualitas Auto y Balumba, y que en 2022 fue el «farolillo rojo» del ranking de beneficios del seguro español, con unas pérdidas de 26,5 millones de euros. A final del tercer trimestre, su primas en Autos ascendían a 94,2 millones, con un incremento del 15%, aunque hay que tener en cuenta la mayor parte de los incrementos de primas de las entidades de Autos provienen de subidas de tarifas, no de aumentos de la cartera de clientes.
Verti, la aseguradora de directo de Mapfre, tuvo unas pérdidas de 2,8 millones en 2022, aunque las redujo con fuerza frente a los 6,1 millones del año anterior. En primas, a final de septiembre de este año sumaba 77,6 millones.
Un caso parecido es el de Fénix Directo, que este año se ha fusionado con Allianz Direct, y que perdió 2 millones el pasado ejercicio, pero que redujo notablemente sus pérdidas desde los 6 millones de 2021. Sus primas a final de septiembre de este año llegaron a los 32,4 millones.